HOMENAJE AL DR. MAURICIO FIGUEROA (PADRE) EN LA NOVENA SESIÓN ORDINARIA DEL CONSEJO DELIBERANTE DE LA CAPITAL POR AUTORÍA DEL COLEGIADO JOSÉ OMAR VEGA, CONSEJAL CAPITALINO
Merecido reconocimiento a un médico de toda la vida
Llevamos a cabo la Novena Sesión Ordinaria en el Concejo Deliberante de la Capital y en esta oportu
nidad, aprobamos un proyecto de mi autoría, mediante el cual se solicita, se otorga Distinción al Mérito San Fernando, al Dr. Mauricio Figueroa, por su invaluable aporte a la medicina de Catamarca.
Para ello contamos con su grata presencia en el recinto de sesiones, acompañado por su esposa e hijos, continuadores de una tradición en la medicina de nuestra provincia.
SU HISTORIA
El Dr. Mauricio W. Figueroa nació en Andalgalá, el 15 de octubre de 1931, realizó sus estudios primarios en su tierra natal y los estudios secundarios en la provincia de Tucumán. Emigró a la ciudad de Córdoba para comenzar a cumplir su sueño, ser médico, vocación que desde adolescente tuvo. Cursó sus estudios en la Universidad Nacional de Córdoba y el 26 de julio de 1962, se graduó de médico cirujano.
En 1963 se desempeñó como médico rural de la zona de Chumbicha, donde fortaleció su medicina y su temple. En dicha localidad funda el Centro Materno Infantil.
En 1964 viajó a Buenos Aires, donde ganó una beca para la especialización en Fisiatría en el Instituto Nacional de Rehabilitación. Esta nueva especialidad le permitiría tener mayor solvencia en conocimientos de enfermedades neurológicas, reumatológicas y ortopédicas.
Realizó prácticas de Electromiografía y Neurofisiología en el Hospital Rawson y en el Servicio de Reumatología del Hospital Rivadavia de Buenos Aires.
Regresó a Catamarca, en el año 1968, fue contratado para completar el funcionamiento del Centro de Rehabilitación del Lisiado, allí dedicó gran parte de su profesión a organizar y desarrollar tareas de rehabilitación y reinserción laboral, llegando a ser director del mismo hasta 1994, fecha en que se jubiló de la planta provincial.
Trabajó como médico de guardia y de planta del viejo Hospital San Juan Bautista, desempeñó su actividad privada de consultorio, formó parte de varias comisiones directivas del Círculo Médico.
En su vida personal, casado con Rosa Dato, padre de cinco hijos, cuatro hijos médicos y una bioquímica, a todos ellos siempre les inculcó el amor por su tierra y el don de servir a la gente.
Desarrolló su profesión hasta los 80 años de edad, retirándose en diciembre de 2011.
Siempre sostuvo que el médico debe mantener su estado médico, este nace del principio de la ética, la moral y la decencia, principios que perduran toda la vida.
Es nuestro humilde homenaje a quien dedicó su vida para mejorar la salud de miles de catamarqueños.
Mi segundo papá el qué me vió nacer. Es un orgullo para mí ser una de sus tantas hijas especiales que el ayudo. Lo amo muchísimo!!